Allá por el año 2000, el escritor Paul Jenkins presentó al Superman de Marvel Comics: El Vigía (apodado El Guardián Dorado).
Marvel llevaba décadas creando personajes emblemáticos con capa y los típicos poderes en su universo ficticio, pero esta era la primera vez que la editorial de cómics creaba un personaje análogo al superhéroe más famoso de su principal rival (DC Comics): Superman, el hombre vestido de azul y rojo.
Al igual que todos los justicieros con superpoderes del panteón de Marvel, Robert Reynolds era un individuo imperfecto, característica que empleaban para humanizar a la persona que se encontraba bajo el traje de licra. Como tenía problemas psicológicos, le faltaba la confianza que tenía el alter ego de Clark Kent para inspirar a la gente.
Iron Galaxy tiene una amplia experiencia en juegos de combate, y da mucha importancia a las mecánicas de lucha. Según pulses el botón de acción más rápido o más lento, encadenarás varios combos increíblemente decentes.
Podría decirse que él (o más bien su creador) logró imponerse a Superman. Pretendía ofrecer la respuesta a una pregunta complicada: en un mundo en el que ocurren un sinfín de desastres todo el tiempo, ¿qué haría un héroe que podría salvar a cualquiera pero que no puede estar en varios sitios a la vez? ¿A qué le daría prioridad?
La solución de El Vigía fue un robot, CLOC, que podía procesar los datos fríamente y calcularlos para informarle de a quién debería salvar y, por omisión, a quién debería dejar morir.
En Extinction, un guerrero solitario es la única defensa frente a una horda de ogros del tamaño de un rascacielos que atacan núcleos de población, y quien debe decidir qué hacer ante el dilema antes planteado eres tú.
El árbol de habilidades, que cuenta con varias ramas, te permitirá ralentizar más el tiempo, saltar más lejos o correr horizontalmente por las paredes. Lo han diseñado para que tengas más opciones a la hora de recorrer cada zona y para que tus ataques sean más potentes..
La inevitabilidad de un evento nivel-extinción
Juegas con Avil, un Centinela con superpoderes que actúa en solitario y que está dispuesto a salir corriendo para ayudar a quien sea, aunque es incapaz de ayudar a todo el mundo. Tendrás que decidir en una fracción de segundo a quién puedes ayudar mejor y dónde.
Además, y para complicar el asunto, es imposible detener la invasión, o eso me contaron cuando probé una demo de una hora de duración de este juego que saldrá próximamente para PS4. El título del juego no señala un desafío a superar, sino que simplemente expone lo inevitable. Lo único que puedes hacer es intentar controlar la situación para crear y preservar un vestigio de la humanidad.
No te explican qué es ese vestigio exactamente, aunque en esos momentos lo realmente importante es evitar que te espachurre un ogro con el puño o que te dé un pisotón. Puedes esquivar a los enemigos, pero no evitarlos: tienes que enfrentarte a estos amenazantes titanes para que se centren en ti y no en destruir las altas murallas que protegen las ciudades o en aplastar a civiles.
Apura el tiempo para salvar toda la gente que puedas
No se trata solo de jugar a dar espadazos, aunque puede llegar a crispar un poco: el sandbox es extenso y hay muchísimos ogros gigantes en el campo de batalla, a los que acompañan hordas de ogros de tamaño normal que pueden infiltrarse en las ciudades más fácilmente para aterrorizar a la población. Además, cada misión tendrá varios objetivos secundarios más allá de la necesidad inmediata de salvar vidas humanas. Los iconos que aparecen en pantalla y el minimapa personalizable emiten zumbidos para llamar tu atención y muestran la distancia que debes recorrer para atender cada emergencia.
Recuerda un poco a Dead Rising en cuanto a la gestión del tiempo, aunque los movimientos de Avil se parecen más a los de otro personaje emblemático de Capcom, Strider, y no tanto a los de Frank West, que es un hombre más común. El Centinela puede ejecutar combos con la espada, correr por paredes, engancharse a salientes lejanos para ir rápidamente a zonas distantes y ralentizar el tiempo.
Esto último es importante a la hora de incapacitar (o decapitar) a los ogros, pues a pesar de su colorido mundo de fantasía, Extinction te permite rebanar miembros con aplomo, aunque solo puedes dar tajos en rodillas o codos, y se regeneran con el tiempo. Para propinar un golpe letal y evitar los ataques de forma permanente tendrás que aumentar el medidor de energía que aparece en la pantalla, aunque hacer que los ogros muestren el cuello para poder decapitarlos tiene su miga.
Hay un montón de orcos diferentes y llevan armaduras distintas. Las armaduras te impiden correr por la espalda de un gigante o subir hasta ella, y cada una se rompe de una manera diferente. Quizá tengas que apuntar a los cierres o engañar a un ogro cercano para que dé un golpe en el suelo y cree una onda de choque que apague temporalmente las llamas de las complejas hombreras del gigante con el que estás luchando.
Mientras intentas descubrir cómo engañar a los temibles colosos para que expongan sus puntos débiles, aparecen notificaciones en la pantalla que te informan de las muertes que podrías haber evitado si lo hubieras hecho un poco más rápido y mejor. ¿Podrás salvar a todos? Iron Galaxy quiere que esa difícil pregunta te persiga y que te impulse a actuar. Extinction te dará la respuesta a principios de 2018.
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